26 Sep 2019/ Miscelanea

Normal Rural Isidro Burgos: Mil 815 días de zozobra

Por UAM Cuajimalpa a las 11:09 am


Félix Bautista Matías, egresado de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos, compañero de generación de Lucio Cabañas –a cuya guerrilla se sumó– recuerda las décadas de resistencia del emblemático plantel. Lamenta que ahora el normalismo esté en crisis y que los maestros ya no tengan “el compromiso de formar cabalmente maestros”.

Afiches con los rostros de los 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos se observan en el plantel donde las clases ya no son iguales desde la noche del 26 de septiembre de 2014. Hoy, las huelgas de maestros son cada vez más recurrentes. Este año, por ejemplo, llevan más de 100 días sin impartir cátedra.

Así se expresa Félix Bautista Matías, quien se matriculó en esa emblemática escuela de resistencia en 1956. Dice que perteneció a la generación de Lucio Cabañas Barrientos.

Combinó sus estudios con el activismo político, incluso fungió como secretario de Actas y Acuerdos del Comité Ejecutivo Estudiantil y la organización a la que perteneció, afín al marxismo-leninismo, creía –dice– en una nueva sociedad socialista.

Al terminar sus estudios ejerció el magisterio durante 13 años; tuvo que dejarlo ante la persecución del entonces gobernador Rubén Figueroa Figueroa a la guerrilla, pues lo acusaron de apoyar a los insurgentes.

Hoy nadie puede pasar a las instalaciones si no conoce a algún estudiante del Comité Ricardo Flores Magón. Y los que logran penetrar, son recibidos con la frase: “Bienvenidos a lo que no tiene inicio; bienvenidos a lo que no tiene fin, bienvenidos a la lucha eterna… Unos la llaman necedad; nosotros la llamamos Esperanza”.

La organización interna de la normal recae en alrededor de 70 alumnos, quienes forman las cuatro academias. Los estudiantes se dividen en dos grupos: el Comité Ejecutivo, compuesto por 15 carteras, y el Comité de Orientación Política Ideológica, cuyo objetivo es concientizar y llevar a la práctica los principios marxista-leninistas aprendidos en los exhaustivos círculos de estudio. También están las tres secretarías más importantes: la de actas y acuerdos, la de organización y la general.

La estabilidad de la escuela ha sido vulnerada por las infiltraciones del Ejército, de la Secretaría de Educación de Guerrero, de los partidos políticos, la guerrilla y hasta del narcotráfico, señala Hernández Rivera, quien fue secuestrado durante la Guerra Sucia en los setenta.

Pese al cierre paulatino de las 36 normales rurales fundadas a partir de 1920, durante la presidencia de Plutarco Elías Calles, y consolidadas en la gestión de Lázaro Cárdenas, las que sobreviven, como la de Ayotzinapa, siguen siendo una opción para la gente de escasos recursos.

El director de la normal de Ayotzinapa, Víctor Gerardo Díaz Vázquez, asegura que las cosas han cambiado diametralmente: “No es sencillo ser director de una escuela a la que le arrancaron 43 alumnos y quererse levantar en un movimiento de manera internacional es difícil retomar las partes académicas”.

Justifica la falta de clases a la exigencia pendiente. Y celebra que en el plantel al menos ya haya honores a la bandera. Sin embargo, no explica por qué en una escuela tan concurrida hay nuevas reglas de ingreso para los visitantes. “Esta no es la Ayotzinapa que yo conocí; era combativa, dura, pero muy académica”.

En vísperas del quinto aniversario de la desaparición de los 43 normalistas, sus compañeros colocan nuevos afiches con sus rostros, barren los salones y los patios del plantel.

El profesor Félix Bautista sostiene que el normalismo rural ha jugado un papel preponderante en la historia de la educación en México. Hoy lo sigue haciendo: “Antes regresábamos convencidos. Íbamos a lo más alejado de las regiones de Guerrero y aprendíamos que la labor era enseñar a la gente campesina, al obrero, al pobre.

Sin embargo, admite: “Hay una crisis en el normalismo, una crisis educativa. He visto este problema desde fuera, hay una deformación. Hoy ya no veo maestros que tengan el compromiso de formar cabalmente maestros, hay muchos intereses: políticos, sindicales. Siempre se vive en un constante conflicto”.

 

Con información de Proceso

https://www.proceso.com.mx/600925/normal-rural-isidro-burgos-mil-815-dias-de-zozobra

Imagen tomada de Proceso

https://www.proceso.com.mx/600925/normal-rural-isidro-burgos-mil-815-dias-de-zozobra


Próximos Eventos