28 Jul 2016/ Noticias

Presentan el número 2 de Diarios del Terruño. Reflexiones sobre migración y movilidad

Por Web Difusión a las 06:07 pm


 

*Refrescante, ver investigadores jóvenes iniciarse con tanta pasión y rigor en el campo de la investigación.

Con la participación de la doctora en Filosofía y en Ciencias Antropológicas Zenia Yébenes Escardó, se llevó a cabo la presentación del número 2 de la revista Diarios del Terruño. Reflexiones sobre migración y movilidad, generada en el Seminario en Estudios Multidisciplinarios sobre Migración Internacional (SEMMI), del Posgrado en Ciencias Sociales y Humanidades de la División de Ciencias Sociales y Humanidades (DCSH) de la Unidad Cuajimalpa.

La historia oral de los centros de concentración del Programa Bracero, los triquis urbanos en San Luis Potosí, personas hondureñas en Tapachula, la casa del migrante “San Juan Diego Cuauhtlatoatzin”, las bienales hispanoamericanas de Arte, la experiencia colombiana de reparación de las víctimas y biopolítica y migración, son los temas tratados en esta edición, los cuales fueron comentados por la también profesora investigadora del Departamento de Humanidades de DCSH, acompañada en la mesa por Carlos Alberto González Zepeda y Alma Trejo, miembros del Comité Editorial de la revista.

La doctora Yébenes aseveró que se trata de un proyecto sumamente interesante y alabó lo que los propios editores llaman su “romanticismo”, al empeñarse en hacer una investigación crítica y comprometida que supone “la posibilidad de distanciarnos de las realidades en que vivimos para poder ver precisamente por qué están haciéndonos daño en muchos casos y cómo contribuyen a reproducir situaciones de desigualdad social”, al tiempo que se vuelve a ellas para tratar de encarar el mundo y lidiar con él de otra manera.

Comentó que los editores expresan un posicionamiento ideológico –no hay posicionamientos neutrales, aunque algunos son más inclusivos y otros más excluyentes; unos más comprometidos y otros que se basan en la carencia, la ausencia de compromiso- y esa es una de las virtudes de esta revista, pues resulta refrescante ver investigadores jóvenes iniciarse con tanta pasión y rigor en el campo de la investigación.

Señaló que este segundo número de la revista sugiere múltiples preguntas, considerando además que el campo de la migración es fundamental porque es el campo por excelencia que más convoca la interdisciplina. Citó a la historiadora Mieke Bal, quien ha hecho una propuesta acera de los conceptos viajeros, donde dice que pensar es la posibilidad de que los conceptos circulen, de que arraiguen en distintos contextos, se van cargando de nuevo significados teóricos y esos nuevos significados teóricos contribuyen para que comencemos a ver de otra manera el mundo.

En esta movilidad conceptual es como realmente se puede pensar, y si el pensamiento tiene que ser móvil, cuando se enfrenta a fenómenos como el migratorio, que implica la movilidad, con mayor razón tiene que estar abierto a  múltiples fuentes, disciplinas y posibilidades de interconectar todas estas cosas.

Comentó que la migración tiene muchas vertientes, unas con más connotaciones políticas, económicas, de desplazamiento nacional, internacional, y es rico que la revista no se centre en una sola veta. Preguntó cómo se puede sobrevivir, qué estrategias vitales tienen que recrearse, qué capacidades deben desarrollarse y qué potencial para aguantar el pasar de una experiencia de extrema violencia, migrar y tener que empezar a negociar la pertenencia al lugar donde se llega “¿qué le pasa a un sujeto que tiene que atravesar todo eso?, ¿cómo se vincula, dónde busca su refugio simbólico, cultural?”.

Afirmó que debe hacerse una diferenciación entre la reparación a la víctima y el perdón, incluso reconocer las limitaciones de las instituciones, porque hay cosas que éstas no pueden dar, en virtud de que “somos mucho más complejos”. En relación con el artículo sobre “Biopolítica y migración”, apuntó que el concepto de biopolítica sólo sirve si se trabaja desde la realidad local de México, hay que aterrizarlo a nuestra realidad local.

Una de las cuestiones interesantes de la biopolítica es que cuando Michel Foucault lo formula está pensando que todo lo que tiene que ver con la administración de la población, de la vida, de su regulación, etc., ya no iba a estar a cargo de los estados sino más bien a cargo de industrias y empresas privadas; pero en México eso sólo sucede con López Portillo, cuando entra toda la cuestión neoliberal. Lo que tenemos que hacer es ver que nuestra biopolítica tiene matices y ver específicamente cuáles son, de qué están cargados, qué hace que esto sea una singularidad, “eso nos lleva a usar los conceptos, no a meter la realidad en nuestros conceptos”.

Finalmente, afirmó que en Diarios del Terruño se ve gente que está pensando, preguntando cosas e intentando plantear una mirada crítica hacia aquello que es complejo y que nos desborda, una mirada donde ellos mismos como sujetos investigadores se están viendo comprometidos. “Es una excelente iniciativa, espero que no acabe el entusiasmo, ni la crítica ni el compromiso”.

La revista puede consultarse en la página de la Unidad Cuajimalpa de la UAM.

http://www.cua.uam.mx/publicaciones/diarios-del-terruno/diarios-del-terruno-numero-02

http://videos.cua.uam.mx/play/862 

 

diariosdelterruo2

 

Redacción CEUC

Fotografías obtenidas de la página de Facebook de Carlos Alberto González Zepeda

 


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